• Club Sato Bormujos

Historia del Club Taekwondo SATO

Los comienzos : “El Indio en Triana”

 
   Para hablar de la historia de Club hay que remontarse muchos años atrás, a 1984. Antonio Pérez Acevedo, sevillano de Bormujos, al que llamaban con cariño el “Indio”, había iniciado su carrera en el gimnasio Kim. Pero tras una pausa por el servicio militar obligatorio, decide fundar un Club de Taekwondo en Sevilla con el apoyo de su hermano Domingo Pérez. Éste último, otro gran deportista múltiples veces campeón de España de culturismo, había adquirido el traspaso de un pequeño gimnasio en la calle Maestro Arrieta de Santa Cecilia en Triana. El gimnasio se llamaba SATO, nombre que mantiene el Club en la actualidad.
   Así, el Máster 7º Dan y entrenador nacional, Antonio Pérez, comienza a impartir clases. Aún, recuerda cuando llegó su primera alumna, María Orellana Míguez. Poco a poco, con el boca a boca, su tatami se llenaba de chicas y chicos de todas las edades. Sin duda Antonio Pérez contribuyó a popularizar las artes marciales en el barrio de Triana. 

Pasión por la enseñanza.

   El “Indio” aún impartía clases en Triana cuando en 1990, animado por niños y niñas del pueblo de Bormujos, comienza a enseñarles Taekwondo en la calle donde vivía. Pero aquello tomó forma y con el apoyo municipal, el Club Taekwondo Sato Bormujos vió la luz. Poco antes, en 1989 cuando ganó la medalla de plata en los europeos de Santander, Antonio Pérez declaraba en una entrevista a ABC:

“...una de las cosas más bonitas que tiene el ser deportista de élite es que te conviertes en una referencia para miles de niños. Por eso es muy importante el comportamiento que tenga en la competición. Eres un ejemplo y los niños lo siguen...”

   Ha llegado a compartir experiencias en la federación española con sus propios alumnos y alumnas. Lo cierto es que parte de su alumnado ha hecho carrera con este deporte.

   En la actualidad imparte clases con el Club Taekwondo Sato de Bormujos en el Polideportivo Municipal. Continúa evolucionando, entregado con la tenacidad que le caracteriza, planteando nuevos retos para la preparación de su alumnado y transmitiendo con pasión este arte marcial, que es más que una actividad física.